lunes, 5 de abril de 2010

CUIDADOS DEL RECIEN NACIDO

Cuando un hogar se ve bendecido con la llegada de un hijo todo es alegría, sobre todo si el niño está sano. Pero a la par de los sentimientos de alegría, existe siempre el temor de estar haciendo las cosas correctamente, tanto en la alimentación como en los cuidados generales.
El tema de la alimentación, especialmente de la lactancia materna, es motivo de discusión en otros capítulos, por lo que nos vamos a referir especialmente a los cuidados generales, y a algunos signos de alerta.

1. Las flemas. Es común que los recién nacidos tengan flemas, y que presenten alguna dificultad para su manejo, por lo que conviene tener una pera de hule a mano, para que en caso necesario, se le introduzca estripada y despacio en la boca, llegando a la parte de atrás de la lengua, con lo cual al soltarla se logra la aspiración de las flemas. Esta maniobra se puede repetir varias veces con el niño de medio lado, y es mucho más segura que tratar de sacar la flema con los dedos.


2. El cuidado del ombligo. La ligadura del ombligo la hace el médico para evitar el sangrado a través de sus vasos, los cuales cumplieron el papel fundamental de alimentar al feto. El resto que queda del cordón umbilical se momifica y se desprende entre el 5 y el 10 día. Durante este tiempo el ombligo debe estar seco, sin sangrado, sin secreciones ni olor fétido, y la piel a su alrededor no debe estar enrojecida, lo que nos indica que no hay infección. Para mantenerlo en esas condiciones, se recomienda limpiarlo diariamente con alcohol de 70 grados, y una vez que el muñón se ha caído, con agua y jabón.
3. El baño. Desde los primeros días el recién nacido se puede bañar usando para ello agua tibia, evitando que el nivel del agua llegue al ombligo; debe utilizarse un jabón simple, sin perfume ni agregados que puedan irritar la piel sensible del niño, de preferencia neutro, y asegurarse de quitarle el jabón por completo. El niño se debe cambiar cada vez que defeque, y limpiarse con agua tibia. Es mejor no usar cremas ni aceites, y debemos recordar que los talcos están contraindicados en los niños pequeños, por el riesgo de aspiración.
4. El abrigo. Los recién nacidos, y con mayor razón si son prematuros, tienen mayor dificultad para controlar la temperatura, por lo que es necesario mantenerlos adecuadamente abrigados, pero sin excesos. La ropa es mejor que sea de algodón, ya que la lana les puede irritar la piel y brotarse por ello. Al asolearlos deben tener poca ropa y debe evitarse el sol directo en la cara.
Los recién nacidos estornudan con frecuencia, y prácticamente presentan hipo cada vez que comen, vomitan a veces y regurgitan pequeñas cantidades de leche, evacuan muy líquido y muy frecuentemente, y conforme pasan las semanas, pueden pasar varios días sin evacuar, todo lo cual es perfectamente normal.
Existen sin embargo, algunos signos de alerta que nos obligan a consultar con el médico, tales como:
• El sangrado por el ombligo o por cualquier otro sitio,
• La presencia de fiebre o la hipotermia,
• La flacidez y el llanto débil,
• El quejido constante,
• Los cambios en el color de la piel (palidez, cianosis o sea el color azulado, la ictericia, que es el color amarillo),
• La dificultad para comer,
• El vómito o el llanto constantes,
• Menos de tres orinadas por día,
• La ausencia de evacuaciones con distensión del abdomen,
• Pérdida de peso en los primeros días de más del 10% del peso al nacer.
Podríamos citar más signos de alerta, pero como en todo, debe usarse el sentido común, y recordar que es mejor consultar cuando se tiene la duda, ya que siempre debe prevalecer el interés del niño.

ATENCION INMEDIATA DEL RECIEN NACIDO




El Recién Nacido Normal
El Recién Nacido - Los Reflejos


¿Cuáles son los reflejos que debe tener un recién nacido?
Reflejo es toda acción o movimiento involuntarios. Algunos movimientos son espontáneos y forman parte de las actividades habituales del bebé. Otros responden a ciertas acciones. Los reflejos permiten identificar la actividad normal del sistema nervioso y el cerebro. Algunos reflejos son característicos únicamente de períodos específicos del desarrollo. A continuación se enumeran algunos de los reflejos normales en los recién nacidos:


•reflejo de búsqueda
Este reflejo se produce cuando se toca o acaricia la comisura de la boca del bebé. El bebé vuelve la cabeza y abre la boca para seguir y "buscar" en la dirección de la caricia. Esto ayuda al bebé a encontrar el pecho o el biberón para alimentarse.
reflejo de succión
La búsqueda contribuye a la preparación del bebé para la succión. Cuando el techo de la boca del bebé siente el contacto, el bebé comienza a succionar. Este reflejo comienza alrededor de la 32ª semana del embarazo, y no se desarrolla completamente hasta las 36 semanas aproximadamente. Es por ello que la habilidad de succión de los bebés prematuros puede ser débil o inmadura. Los bebés también tienen un reflejo de llevarse la mano a la boca que acompaña los reflejos de búsqueda y de succión y pueden chuparse los dedos o las manos.
•reflejo de Moro
El reflejo de Moro a menudo se denomina reflejo de sobresalto porque normalmente se produce cuando el bebé se sobresalta por un sonido o movimiento estrepitoso. En respuesta al sonido, el bebé echa la cabeza hacia atrás, abre los brazos y piernas, llora, y después vuelve a colocar los brazos y piernas en la posición original. Algunas veces el bebé puede sobresaltarse con su propio llanto, lo cual inicia este reflejo. Este reflejo dura hasta aproximadamente los cinco a seis meses de edad.
•reflejo tónico del cuello
Cuando se vuelve la cabeza de un bebé hacia un lado, el brazo de ese lado se estira y el brazo opuesto se dobla por el codo. Esto a menudo se denomina "posición de esgrima". El reflejo tónico del cuello dura hasta aproximadamente los seis a siete meses de edad.
•reflejo de prensión
El acariciar la palma de la mano del bebé provoca que el bebé cierre los dedos en un apretón. El reflejo de prensión dura solamente un par de meses y es más fuerte en los bebés prematuros.
•reflejo de Babinski
Cuando se acaricia firmemente la planta del pie, el dedo gordo se dobla hacia la parte superior del pie y los otros dedos se despliegan en abanico. Este reflejo normalmente dura hasta aproximadamente los 2 años de edad.
•reflejo del paso
Este reflejo también se denomina reflejo de caminar o de baile porque parece que el bebé está dando pasos o bailando cuando se lo sostiene de pie con los pies tocando una superficie sólida.